"American Horror Story (2011)" BURBRUJA INMOBILIARIA

Las casas embrujadas, encantadas, hechizadas, poseídas, malditas,..., han sido tema recurrente tanto en literatura como en el cine. Sucesos de todo tipo se asocian generalmente a mansiones del siglo XX o anteriores, casas con estructuras muy similares: escaleras que dan a un sótano sombrío y penumbroso, otras escaleras que dirigen a una buhardilla llena de trastos o completamente vacía y tenebrosa, un jardín con rosas rojas y un gato negro que merodea en busca de no se sabe bien qué y una niebla espesa que hace levitar los cimientos y que convierte la mansión en impenetrablemente oscura.

Si además de todo esto le sumamos un largo historial de macabros asesinatos tenemos como resultado nuestra Mansión en el Country Club Park de Los Angeles; una casa sospechosamente tirada de precio que alberga en su interior decorado de la manera más recargada posible fantasmas y poltergeist que habitan en ella desde su construcción a principios del siglo XX.

Con claros referentes como El Resplandor de Kubrik o La Semilla del Diablo de Polanski, recordad auqel Hotel perdido en medio de la nada y El edificio Dakota, esta serie del año pasado recupera un estilo muy atractivo visualmente y con una gran carga psicológica. Los nuevos propietarios de la Mansión, dejémoslo en embrujada, son una familia con problemas procedente de Boston que se instala sin saberlo en una casa en la que cualquier muerte queda para siempre ligada a la misma.

Quizás una de las claves de la serie sea la enorme carga psicológica que deben soportar los personajes, tanto de un lado como del otro; además de que la casa y la vecina (antigua propietaria) protagonizada por la excelente Jessica Lange comparten un extraño y perturbador vínculo e incluso yo diría que pacto.

Esta primera temporada me deja un buen sabor de boca, ciertamente con más "macabrismo" y morbo del necesario, pero con una historia original y que como he dicho recuerda en muchas de sus escenas a grandes clásicos del cine de terror. Según he podido descubrir la siguiente temporada presenta cambio geográfico y de historia...

Un abrazo.

Haunted houses, haunted, haunted, possessed, damn ... have been a recurring theme in literature and in film. Events of all kinds are usually associated with twentieth-century mansions or older, houses with very similar structures: stairs leading to a basement dark and shadowy, other steps that lead to a cluttered attic or completely empty and dark, a garden red roses and a black cat prowling in search of it is not clear why and a thick fog that levitates the foundation and the mansion becomes impenetrably dark.

If in addition to all this we add a long history of grisly murders have resulted in our Manor Park Country Club in Los Angeles, a house price suspiciously roll housed in its interior decorated in the most ornate possible ghosts and poltergeists who inhabit in it since its construction in the early twentieth century.

With clear references as to Kubrick's The Shining or Rosemary's Baby by Polanski, remember auqel Hotel lost in the middle of nowhere and the Dakota building, this series last year recovered a visually appealing style with a great psychological burden. The new owners of the Mansion, let it in Haunted are a troubled family from Boston who unknowingly installed on a house that any death is forever linked to it.

Perhaps one of the keys to the series is the enormous psychological burden to be borne by the characters, both from the side as the other, besides the house and the neighboring (former owner) starring Jessica Lange for the excellent share a strange and disturbing link and even I would say that covenant.

This first season leaves me a good feeling, certainly with more "macabrismo" and morbid than necessary, but with an original story and as I said remember that in many of his scenes to great classic horror films. As I have discovered the following season presents geographic and historical change ...

A hug.

La nota / The Mark: